Las portadas de los informes que recibía el señor Bush del Ministerio de Defensa durante la primera fase de la guerra de Irak, recién filtradas a la revista GQ [en inglés, pulsad en Click for slideshow para verlas], dan (aparte de miedo) una buena idea del paisaje mental de Donald Rumsfeld y sus amigos, donde supongo que abundan las citas bíblicas y las imágenes de sangre y destrucción, mezcladas en un todo fundamentalista que a unos lleva a la Casa Blanca y a otros (la mayoría, por suerte) a instituciones psiquiátricas de todo tipo. Con razón lo llamaban "cruzada contra el terror".
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